El coaching es un un proceso comunicativo cuyo objetivo es programado y aceptado por el coachee. Por poner un ejemplo tangible, en un proceso entre un alumno y coach, se plantea el objetivo final de controlar la ira por parte de un joven, que se descontrola con normalidad y se comprometen ambos a iniciar un diálogo constructivo por ambas partes, coach o maestro de comunicación y él mismo, el asesorado, con el objetivo final de controlar mejor su emoción negativa habitualmente desbordada.
Es importante exponer que en todos los procesos a realizar, soy partidaria antes de iniciar los diálogos, en jóvenes o niños de establecer la asertividad como la conducta verbal más eficaz, por cuanto permite defender los propios derechos y respetar los ajenos. Esto se traduce en una mayor autoestima y una mejor comprensión de las necesidades ajenas. En jóvenes o niños es muy importante, pues los resultados pueden mejorar sustanciosamente en comportamientos posteriores si los niños/jóvenes comprenden sus derechos y deberes dentro del proceso comunicativo y así lo aplican posteriormente en sus conductas habituales, incluyendo esta conducta verbal dentro de su rutina social.
DERECHOS Y DEBERES DE LA ASERTIVIDAD
DERECHOS ASERTIVOS BÁSICOS
- Tengo derecho a juzgar mi propio comportamiento.
· Tengo derecho asertivo a no dar razones.
· Tengo derecho a tener y expresar mis propios sentimientos y opiniones.
· Tengo derecho a no ocuparme de otros.
· Tengo derecho a cambiar de opinión.
· Tengo derecho a pedir lo que quiero y necesito.
· Tengo derecho a cometer errores.
· Tengo derecho a decir «No», «No lo sé» o «No lo entiendo».
· Tengo derecho a decir no me importa.
· Tengo derecho a prescindir de la buena voluntad de otros.
· Tengo derecho a tener debilidades.
· Tengo derecho a hacer lo que sea necesario para proteger mi salud física y mental.
DEBERES ASERTIVOS BÁSICOS
· Tengo el deber de escuchar lo que el otro pide/necesita y de aceptar lo que puede dar.
· Tengo el deber de aceptar que el otro se puede equivocar, y el deber de dejarle margen para rectificar o para cambiar de opinión.
· Tengo el deber de dejar momentos y crear espacios para poder decidir.
· Tengo el deber de aceptar que alguien nos diga que no.
· Tengo el deber de respetar al otro como legítimo otro, por muy distinto que sea.
· Tengo el deber de respetar a los demás y considerarlos tan dignos como a nosotros mismos.
· Tengo el deber de ofrecer información cuando sea pertinente.
· Tengo el deber de respetar los momentos y los espacios de los demás.
· Tengo el deber de vivir mi propia vida y dejar que los demás vivan la suya.
· Tengo el deber de controlar las propias emociones y sentimientos, y de saber conectar con las de otros.
· Tengo el deber de aceptar los momentos no asertivos del otro.
Todo lo expuesto es susceptible de tener matices y pinceladas, por lo tanto,estas pautas generales deben ser adaptadas a cada una de las situaciones y casos particulares. Muchas gracias por leer y si quieres trabajar la asertividad o otros temas de desarrollo personal con tus hijos, familia o empresa, contacta conmigo y empezamos :). Que tengas un bonito día. Sandra Macarro